Aunque lleva más de 500 años en el mapa, Curazao ‘volvió a nacer’ como un país autónomo del Reino de los Países Bajos junto a San Martín, otra de las islas de las antiguas Antillas Holandesas. Conoce qué visitar en este destino de invaluable historia y lugares naturales por descubrir.
La herencia histórica de los curazoleños es sin duda una de las más ricas en el Caribe. Desde los primeros pobladores indígenas, los Arawaks, hasta la conquista española en 1499 y la posterior colonización holandesa en 1634, la historia ha dejado rastro en cada uno de los rincones de esta pequeña isla de 443 Km2 a la que llegan decenas de cruceros durante todo el año.
La capital, Willemstad, es la mejor muestra de la historia curazoleña. Declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO (1997) por su única arquitectura colonial holandesa, está dividida en dos distritos históricos que no debes dejar de visitar: Punda y Otrobanda, separados por la Bahía de Santa Anna.
En los distritos vecinos de Pietermaai y Scharloo se encuentran algunas de las más hermosas mansiones que datan del siglo XVIII.
Patrimonio histórico
Para explorar la cultura de un nuevo país no hay nada mejor que caminar por sus calles. En Willemstad no te puedes perder estos lugares para comenzar a conocer el patrimonio de Curazao:
Descubre las raíces africanas
Tras la llegada de los holandeses en 1634, Curazao se convirtió en un puerto de esclavos y comercio. Hoy, después de tanto tiempo se conservan tradiciones de influencia africana como la lengua de Papiamentu, y por supuesto, en la gastronomía local. Imperdible ir a la casa Kas Di Pali Mashi, para conocer la manera en que vivían los afro curazoleños, y los museos Kura Hulanda y Tula.
Arquitectura y color
Al llegara Willemstad es imposible no dejarse encantar por las edificaciones coloniales de colores vibrantes. Más de 765 edificios han sido registrados como monumentos históricos, entre los que se cuentan Casas de campofuertes (Landhuizen) y fuertes como el Amsterdam y Nassau. Conoce más monumentos de Curazao aquí.
Playas y otros destinos naturales
A lo largo de la costa de Curazao se encuentran 17 playas para todo tipo de gustos. Desde la punta de playa Bahía Azul, un lugar de planes familiares, hasta la hermosa Kalki, para los amantes del buceo y el snorkeling.
Parque Natural Kristoffel. Es uno de los miradores y lugares naturales más increíbles de la isla. Ubicado en el lado occidental, alberga especies únicas de flora y fauna, entre las que se encuentran orquídeas, el búho Palabrua y el ciervo de cola blanca de Curazao. ¡Los planes por hacer son muchos! Puedes tomar un safari por gran parte de las 3.500 hectáreas naturales u optar por un paseo guiado en bicicleta.
Otros destinos naturales por explorar: el Parque Marino de Curazao y El Acuario, donde es permitido interactuar con algunos animales al igual que en la Academia de Delfines. En tierra, también está entre los destinos recomendados el Parque Nacional Den Dunki, que solía ser un campo de esclavos.
